El IVA se gira sobre el total cargado al cliente, incluidos los portes, seguros, comisiones, etc.
Según el informe PISA 2012 sobre competencia financiera, “uno de cada seis alumnos españoles […] no alcanza el nivel básico de rendimiento en competencia financiera –lo que indica que, como mucho, son capaces de reconocer […] para qué sirven documentos financieros corrientes, como una factura.”
No es una evaluación alentadora. Aunque puede que el mal resultado sea consecuencia de la popularización del esto-va-sin-factura: si los chavales no han visto muchas facturas, posiblemente, tampoco sabrán interpretarlas.
Dejando a un lado las bromas, lo que sí sería bueno es que, puestos a preguntar, al menos se les presente a los alumnos una factura bien hecha.
Por ejemplo, en algunas de las cuestiones planteadas a los alumnos (ver ilustración superior) se les exponía una factura con la siguiente liquidación:
Los portes ¿sin IVA?
Con muy pocas (poquísimas) excepciones, el IVA se gira sobre el importe total cargado al cliente, incluidos los portes. Siguiendo el ejemplo anterior, lo correcto sería liquidar:
Por otra parte, para no despistar todavía más al alumnado –que en temas de moda, seguro que está muy puesto -, las camisetas, pantalones y bufandas (es decir, la ropa en general), aquí tributa al 21% y no al 10%, que figura en el supuesto.
Y, finalmente, se aprecia que el departamento financiero de la empresa que emitió la factura tenía dotes de clarividencia, pues la factura se emitió un mes antes (28 de febrero) del día en el que se efectuó la venta (31 de marzo).
¿Suspendidos en facturación los autores de las pruebas del informe PISA?